Hay gente, que día tras día, se empeña en hacer la vida de los demás complicada, incluso si la convierten en un infierno, mejor que mejor.
Lo curioso de todo esto, es que disfrazan su falta de empatía con el resto de la humanidad, actuando como si fueran personas honorables...y nada más lejos de la realidad.
En nuestro día a día, unos más que otros, nos encontramos con gente de esta calaña. A veces los vemos venir a distancia, pero en la mayor parte de los casos, son lobos disfrazados con piel de cordero, o lobas, que en este tema, hay que tener en cuenta ambos géneros.
Gente sin escrúpulos, que no son capaces de frenar, ante nada ni nadie, a pesar de que las consecuencias de sus actos, puedan estar dañando a gente a la que quieren, bueno, o piensan que quieren, por qué sinceramente, no quiero a nadie en mi vida, que me "quiera" de esa manera. Ya sé que ha sonado muy redundante, pero es lo que hay.
Sólo concibo una forma de pasar por esta vida, y es haciendo feliz, o al menos intentarlo, a la gente que me rodea, e incluso a los que no conozco, porque nuestra forma de actuar, es lo que nos define como personas. Y ciertos personajes, siguen existiendo, por qué de todo tiene que haber en este mundo, pero yo desde luego, en mi vida, sólo admito gente que me aporte cosas positivas, ya que las que aportan cosas negativas, para mí, están de menos.
Pero una pregunta, el/la borde, ¿nace, o se hace? Pues yo creo que nace, pero a base de entrenamiento, llegan a ser profesionales en toda regla, sino, no se entiende, que cierta clase de personajes, lleguen a tener el "hijoputismo" tan alto. Eso sí, las dotes interpretativas, que se gastan para convencer al resto del mundo, de lo mal que les trata la vida, son dignas de un Óscar.
Mañana, más y mejor.
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